En las anteriores entradas de nuestro blog, hemos profundizado en cómo algunos sectores industriales pueden implementar la eficiencia energética para mejorar sus prácticas productivas y disminuir sus costos de producción asociados al consumo de energía. En esta nueva entrada queremos analizar porque es importante implementar la eficiencia energética en un mecanismo de producción denominado frio industrial.

¿Qué es la producción frio industrial? 

El frio industrial es el nombre que recibe la actividad tecnológica de diseñar, construir, implementar y mantener maquinas frigoríficas, así como sus instalaciones. Este sistema se utiliza principalmente en la industria cárnica y en las industrias que necesitan la refrigeración para la conservación de alimentos y bebidas. 

Características del frio industrial 

En este tipo de producción hay una oportunidad idónea de implementar la eficiencia energética porque el consumo de energía puede llegar a representar entre el 60 % y el 70 % de los costos totales del ciclo de vida de estas instalaciones. Generalmente, estos lugares tienen instalaciones de refrigeración industrial con sistemas complejos, conformados por conjuntos de equipos que trabajan de manera articulada. Algunos de estos equipos principales son: los compresores de refrigeración (de tornillo o de pistón), separadores de líquido, evaporadores, condensadores evaporativos, válvulas de expansión. 

Dentro de estos equipos hay unos que tienen un mayor porcentaje de consumo. En este caso es importante mencionar los compresores de refrigeración que, sin duda, representan una oportunidad de reducir los porcentajes de consumo y de mejora en la eficiencia energética de las instalaciones.  

Recomendaciones de eficiencia energética para el frio industrial 

Algunas recomendaciones específicas alrededor de los equipos de compresión son las siguientes: sustitución de equipos de compresión obsoletos con tecnología más moderna; implementar control inteligente, con base a algoritmos de optimización, porque permite reducir el consumo energético de los compresores entre un 15 y un 40%. Este cambio también podría ser posible sin una inversión alta en nuevos equipos, adecuando las instalaciones y con un sistema centralizado de control.

Por último, los métodos y trabajos de mantenimiento no deben ser infravalorados ya que ofrecen grandes aportaciones al ahorro de energía. En este sentido, la transformación digital está siendo un eje fundamental para controlar en tiempo real el funcionamiento de la instalación. Con el propósito de ajustar las necesidades a cada situación a lo largo del día y para aspectos como el control de fugas.

Para cumplir con este propósito es indispensable que los tomadores de decisiones tengan un conocimiento claro de las distintas opciones de sistemas de generación y distribución que se adaptan mejor a cada instalación. Una correcta toma de decisiones puede equivaler a un ahorro del cincuenta por ciento de la tarifa eléctrica con equipos de alta eficiencia.